Trucks

Volvo para todo

La empresa familiar sueca Sanfridssons lleva conduciendo camiones Volvo desde los inicios de la empresa, en 1961. Hace veinticinco años, se convirtió en una de las primeras empresas de transporte en el mundo en adquirir un Volvo FH.
Con los años, Sanfridssons ha pasado de ser una pequeña empresa de transporte rural a convertirse en una moderna empresa de servicios de alcance nacional.

Son las 5:45 de la mañana y Göran Sanfridsson ya está trabajando. Aunque es el director ejecutivo de las operaciones de la empresa familiar, le gusta implicarse en el trabajo práctico y no duda en echar una mano cargando y descargando camiones o con trabajos mecánicos.

“Mis hermanos y yo crecimos en el campo, rodeados de camiones y de conductores. Cuando era niño, siempre soñaba con conducir un camión y solía darle la lata a mi padre para poder acompañarle cuando repartía leche en el pueblo. Por entonces ya me gustaba levantarme temprano”, recuerda Göran con una sonrisa.

Alf Sanfridsson, padre de los hermanos, era un joven agricultor que necesitaba buscarse un modo de vida cuando su hermano asumió el control de la granja familiar. Justo entonces, una empresa llamada Gäsene Dairy abrió una nueva línea de distribución y necesitaba a alguien que realizara sus entregas matutinas de leche. Alf decidió convertirse en repartidor de leche y compró su primer camión Volvo. Al poco tiempo, también tuvo tareas de transporte de grava por las tardes y, con los años, los clientes fueron aumentando. Alf, que estaba muy satisfecho con su camión Volvo, podía adquirir cada vez más vehículos y emplear a más conductores. Al cabo de los años, su negocio creció gracias a grandes clientes como Herrljunga Cider, una conocida marca sueca de sidra, y pasó de ser una pequeña empresa de transporte rural a convertirse en una moderna empresa de servicios de alcance nacional.

Los tres hijos de Alf se iniciaron pronto en el negocio y era natural que llegara el día en que asumieran el control. Cuando su padre se jubiló en 2006, ya llevaban varios años trabajando en la empresa y dividieron el negocio entre ellos para no interferir en las tareas de cada uno. Göran, el hijo mayor, es el director ejecutivo, Mats dirige la empresa de piensos de la granja, Ljungs foder, y Torbjörn, el hermano menor, es el director de transporte. El padre está felizmente jubilado, pero sigue dando buenos consejos.

“Nuestro padre ha hecho un trabajo fantástico al desarrollar la empresa junto a sus clientes y cuidando las relaciones que entabló con ellos. Y sucede lo mismo con las relaciones con nuestros empleados y con Volvo Trucks. Papá siempre nos decía que, si te cuidan bien, serás fiel. Es una de las lecciones más importantes que hemos aprendido de él tanto mis hermanos como yo”, afirma Göran.

Atraer y retener a empleados con talento ha sido crucial para el éxito de Sanfridssons. Contar con vehículos fiables y poner un gran énfasis en la seguridad vial han sido elementos de gran importancia a la hora de retener al personal y a los clientes.

“Hay quien piensa que en nuestra familia somos 'amantes de Volvo', pero para nosotros lo importante es tener camiones que funcionan sin reparaciones innecesarias. Son nuestras herramientas y hemos recorrido miles de kilómetros con nuestros camiones Volvo. Además, nuestros conductores están muy satisfechos. Así que nunca hemos tenido motivos para cambiar de proveedor”, explica Göran.

El cuidado de los conductores ha sido uno de los motivos por el que varios empleados han seguido trabajando para la empresa durante gran parte de sus vidas laborales. Svante Alexandersson es el conductor que lleva con ellos más tiempo: 34 años. También es el conductor que condujo el primer Volvo FH de la empresa cuando se lanzó el modelo en 1993 y aún recuerda lo que pensaron del camión entonces tanto él como los demás.

Cuando era niño siempre soñaba con conducir un camión y solía darle la lata a mi padre para poder acompañarle.

“Alf Sanfridsson me dijo que iba a tener un camión nuevo. Cuando entregaron el Volvo FH, fue algo totalmente novedoso y como éramos casi los únicos que lo tenían al principio, llamamos mucho la atención: ¡todo el mundo se volvía a mirarlo cuando lo conducíamos! Tuve ese camión durante doce años antes de que pasara a tener una segunda vida útil en otro lugar”, comenta.

 

Desde entonces, Svante ha conducido otras dos generaciones del Volvo FH y ha podido supervisar de cerca cómo han avanzado los diferentes desarrollos. En su opinión, la suspensión neumática y la introducción de I-Shift han sido fundamentales para evitar lesiones al conductor, mientras que la dirección electrónica ha sido de gran ayuda al transportar remolques y al dar marcha atrás y descargar en las entregas. Está especialmente encantado con su último Volvo FH16 550.

“El desarrollo del Volvo FH ha sido fantástico. El volante de este último camión tiene un potencial de ajuste totalmente nuevo, al igual que los asientos. El sistema de calefacción funciona a la perfección, la escotilla del techo deja que entre iluminación de buena calidad y la mayor distancia con el parabrisas deja más espacio en la cabina, por lo que me siento mejor al conducir. En cuanto a la litera, es la mejor en la cabina de un Volvo FH”, afirma y añade:

“Aquí en Sanfridssons cuidan muy bien de sus empleados. Nunca han dudado que los conductores debíamos tener el mejor equipo, como paquetes de confort superiores para la cabina. Es algo que, como empleado, se agradece”.

Tanto Svante como Göran también están encantados con los motores Volvo. Llevan dos años y medio conduciendo con HVO, un diésel sintético. Con la ayuda de este combustible renovable, Sanfridssons ha podido reducir su impacto climático y Göran está siguiendo muy de cerca el desarrollo de nuevas líneas motrices sostenibles para el transporte del futuro. Las cuestiones medioambientales siempre han sido prioritarias para la familia Sanfridsson, que ha crecido entre bosques y campos. Por ello es lógico y natural que quieran conservar sus recursos y formar a sus conductores sobre el ahorro de combustible.

También cuidan mucho de los camiones de la empresa y con frecuencia recorren hasta 1,2 millones de kilómetros antes de venderlos. Algunos de ellos han acabado en lugares tan lejanos como África. Hace unos años, Alf se encontró por casualidad con uno de sus camiones Volvo FH antiguos en una visita a Zambia. Había recorrido un total de 3,4 millones de kilómetros y el conductor africano y sus dos ayudantes de carga estaban muy orgullosos de su camión, que aún seguía llevando el logotipo de Herrljunga Cider.

El desarrollo del Volvo FH ha sido fantástico.

“Me comentaron que el camión funcionaba perfectamente y que no había necesitado más que un mantenimiento normal desde su llegada. Es increíble que nuestros camiones Volvo FH antiguos hayan tenido una vida útil tan larga en otra parte del mundo”, cuenta Göran Sanfridsson.

Sanfridssons

Fundada en: 1961
Propietarios: Göran, Mats y Torbjörn Sanfridsson.
Número de camiones: 37, de los cuales 32 son Volvo. 
Personal: 58, de los cuales 50 son conductores.
Cargas principales: Bebidas, tuberías de plástico, cemento, madera, piedra, especias.
Tiempo de retención (camiones): de 8 a 10 años.
Grandes clientes: Herrljunga Cider, Pipelife, Kryddhuset y otros.
Primer Volvo FH: Adquirido en 1993. Vendido en 2006.
Certificado de seguridad en carreteras: Desde 2015.